Los trabajos verticales, también conocidos como trabajos en altura, se refieren a tareas que se llevan a cabo en lugares elevados o en vertical, donde los trabajadores deben utilizar técnicas y equipos especiales para acceder y trabajar de manera segura en estas áreas. Los trabajos verticales se realizan en diversos entornos, como edificios, puentes, torres, estructuras industriales, entre otros.

Algunos ejemplos comunes de trabajos verticales incluyen:

1. Instalación y mantenimiento de fachadas: Los trabajadores verticales pueden llevar a cabo la instalación, reparación o mantenimiento de revestimientos, cristales, elementos decorativos u otros elementos de las fachadas de los edificios.
2. Inspección y mantenimiento de estructuras: Se utilizan técnicas de trabajo vertical para llevar a cabo inspecciones detalladas, reparaciones y mantenimiento en estructuras como puentes, torres de comunicación, antenas, chimeneas, etc.
3. Pintura y limpieza de edificios: Los trabajadores verticales pueden realizar tareas de pintura y limpieza en altura, utilizando técnicas de acceso mediante cuerdas o andamios suspendidos.
4. Instalación y mantenimiento de sistemas de seguridad: Los profesionales de trabajos verticales también pueden encargarse de la instalación y mantenimiento de sistemas de seguridad, como líneas de vida, anclajes, redes de protección, entre otros.
5. Rescate en altura: Los equipos especializados en trabajos verticales también están capacitados para realizar rescates en altura, proporcionando asistencia a personas que quedan atrapadas o en situaciones de emergencia en lugares elevados.

Es importante destacar que los trabajos verticales requieren de personal debidamente capacitado y certificado, así como de equipos de seguridad adecuados. Se deben seguir normas y protocolos específicos para garantizar la seguridad de los trabajadores y evitar accidentes.